viernes, 13 de junio de 2008

ESAS GRANDES ALAMEDAS QUE AUN SIGUEN CERRADAS

ALLENDE: La revolución en la palabra y en la acción
El mensaje de despedida del Presidente Allende ese fatídico día de Septiembre -que a estas alturas se nos muestra en esas imágenes documentales para el “turis”- debe ser entendido como un mensaje continuador. “Otros hombres superarán este momento gris y amargo”, con este mensaje Allende alzó su mirada histórica de larga duración esperanzado en que las armas de lucha popular no se perdieran en el tiempo, para que “el metal tranquila de su voz” renaciera una y mil a través del tiempo. En los oscuros tiempos de la dictadura, pareció que se retomaba el legado de Allende, la resistencia a la tiranía encajaba en este proceso histórico del movimiento popular, pero el eterno tiempo de transición a la “democracia” fue aniquilando el fuego interno de la rebeldía y los reacomodos políticos fueron transformando este movimiento continuo desde mediado de 1930, en una desmovilización popular perdida en el tiempo y en el espacio desde los ´90. El proceso de reivindicaciones sociales llevada a cabo por los propios obreros, campesinos y trabajadores que comenzó a finales del siglo XIX y que transformó a la gran mayoría del “bajo pueblo” (G. Salazar) en sujeto histórico, activo y partícipe de los cambios político-sociales del país, se desvaneció entre los consumidores dominados por el mercado, volviendo a la pasividad de ser solo un objeto político. Hoy en día, los sectores populares en como sujetos políticos han desaparecido o en el mejor de los casos está disperso en múltiples organismos ya no de resistencia, si no que, de conformación y letargo nostálgico de una revolución que a estas alturas no se desarrolla conceptualmente en su evolución material propia de los tiempos.
Es lamentable ver día a día como aquellos que utilizan el nombre y la figura de Allende, son quienes dan la espalda al pueblo y se pierden en los abrazos concertacionistas, alimentando sus propios intereses.
“Para que vuelvan a abrirse las grandes alamedas, aun cerradas, se necesitarán otros hombres que estimulen el desarrollo de fuertes movimiento sociales (no los traidores que se dicen socialistas y que se acomodan políticamente ignorando el sentir popular), mientras esto no ocurra, el legado político de Salvador Allende continuará siendo un capital inmovilizado, un icono desprovisto de significado histórico concreto y de operatividad política real.-

Para profundizar más en el tema: “Salvador Allende en la perspectiva Histórica del Movimiento Popular Chileno” Sergio Grez toso.

Para coplementar: “Violencia, Gradualismo y Reformas en el desarrollo político chileno” Tomas Moulian en “Estudios sobre el sistema de partidos en Chile” Adolfo Aldunate, Angel Flisfich y T. Moulian


Cristian Gutierrez

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola !
... Qué temazo!!! de Salvador Allende,buen tema...hmmmm....me dejo mucho que reflexionar,después de una clase que hablamos de aquella historia en ccias...

estés bien
Saludos, para tú persona

Anónimo dijo...

la ánimo es: Nataly M.